Durante casi más de cinco décadas de existencia Balay se ha distinguido por un carácter innovador en la búsqueda de nuevos electrodomésticos y las prestaciones que los mismos proporcionan teniendo como lema “Por un mundo más cómodo” con un significado que describe plenamente la filosofía de la marca.

En los inicios de la marca en los años xl los socios fundaron una empresa especializada en la fabricación de transformadores para radios y reactancias para fluorescentes.

De las primeras sílabas de los apellidos de los fundadores del empresa nace el nombre de la marca Balay. Entre los años cincuenta y sesenta Balay inicia la producción propia de electrodomésticos y aparatos de cocina y en aquel momento se consolida como líder en el mercado de España, especialmente en la línea blanca de lavado siendo el primer fabricante en España que comercializa la secadoras de condensación de vapor.

Entre los años setenta y noventa, Balay y fiel a su filosofía innovadora incorpora nuevas líneas de producto  en su catalogo, añadiendo lavavajillas y los aparatos de frío doméstico, además de un nuevo concepto en la cocción, las encimeras de inducción. Para ello Balay inaugura nuevas plantas de fabricación y en 1989 se integra al grupo alemán BSH líder mundial en el sector de electrodomésticos.

A partir de los años 90 Balay refuerza su compromiso con la protección del medioambiente siendo la primera marca nacional en eliminar los gases CFC de sus circuitos de refrigeración, al margen de esto Balay hace hincapié en sus sistemas de diseño de producción potencial, la eficiencia energética de los aparatos fabricados, hasta el reciclaje de los mismos. Cuidando especialmente los efectos colaterales que sus productos realizan el medio ambiente como consumo de agua, consumo energético, vertidos contaminación acústica y residuos en aras de alcanzar un desarrollo sostenible.